Con el cambio de año llegan los buenos propósitos y uno de los más populares tiene que ver con la alimentación y los hábitos saludables, seguramente movidos por el remordimiento que el maratón de comidas navideñas nos ha despertado en nuestras conciencias.
Como muchos propósitos de año nuevo se suele empezar con mucha fuerza e ilusión pero a menudo esa fuerza se diluye y pierde fuelle, quedándose en un recuerdo del pasado al que volvemos a recurrir normalmente en el mes de mayo, cuando ya queda poco para el primer
posado veraniego del año.
Pues bien, querer es poder, y si tu propósito de año nuevo es llevar una vida sana y una alimentación saludable, lo puedes conseguir, todo es cuestión de organización y constancia, gracias ellas lo que al principio resulta costoso, se acaba convirtiendo en rutina.
HÁBITOS SALUDABLES
Llevar una vida saludable implica necesariamente la realización de alguna actividad física acompañada de una alimentación saludable.
Deja un hueco el domingo para planificar la semana y saca al menos 3 horas para practicar deporte, elige los días, anótalos y dale prioridad. Si crees que no estás en forma como para machacarte en el gym al menos dedica esas 3 horas a la semana a caminar, aunque no lo creas
tu cuerpo lo agradecerá y tu mente también 😉 . Una vez que se haya convertido en rutina pronto esas 3 horas semanales pasarán a 4 o incluso 5.
ALIMENTACIÓN SALUDABLE
A estas alturas todos sabemos que alimentos son más saludables y cuales menos, depende de nosotros que llevemos una dieta equilibrada, algo que favorecerá considerablemente nuestro bienestar ya que algunos nutrientes como las proteínas, el calcio, la vitamina C y la vitamina D son claves para el mantenimiento de una buena salud muscular, ósea y articular.
Os dejamos a continuación 7 tips para lograr que la alimentación saludable no sea una utopía:
– Planifica el menú de la semana con tiempo y haz tu lista de la compra, tenla siempre a mano y no te desvíes del camino.
– Acuérdate de la fruta y las verduras a diario. Que sean de temporada y recuerda variarlas, no consumas siempre las mismas. Algunas además de ayudarnos a llevar una vida saludable, también nos ayudan a tener buen humor 😀
– Come tranquilo y modera el tamaño de las porciones.
– Elige alimentos preparados en casa en lugar de procesados.
– A lo largo del día bebe al menos 2 litros de líquidos preferentemente agua. No esperes a tener sed para hidratarte.
– Consume diariamente leche, yogur o queso, preferentemente descremados.
– Al consumir carne quítale la grasa visible y aumenta el consumo de pescado.
Y nuestro último consejo; Recordad, Querer es Poder, ¡ánimo!.
¡Feliz y Saludable 2019!