A pesar de que las recomendaciones son llevar una dieta variada, rica en fruta y verdura, son muchas las personas que dicen que no toman estos alimentos con frecuencia. Las excusas son variadas: porque no les gustan, porque no saben cómo prepararlos, etc. y si hablamos de niños, puede ser desesperante. Por eso, te damos algunas ideas para hacer más atractivas las frutas y verduras en tu casa.
Comer frutas y verduras a diario no es una moda, sino que es fundamental para poder obtener las vitaminas, fibra, antioxidantes y otros nutrientes que nuestro cuerpo necesita para funcionar correctamente. Esta recomendación es más importante todavía en niños y jóvenes, por encontrarse en pleno desarrollo. Además, en situaciones de especial desgaste (época de exámenes, unas oposiciones, ejercicio o actividad física intensa…) llevar una dieta rica y variada en vegetales es uno de los aspectos principales para evitar carencias nutricionales o enfermedades. No obstante, la OMS recomienda el consumir 5 piezas de fruta/verdura al día. Y una de las principales preocupaciones en muchas familias es que sus hijos coman sano. Antes de continuar: ¿cuántas piezas de fruta o verdura has comido hoy? ¿cuántas se consumen en tu casa?
Cómo hacer que tus hijos coman frutas y verduras
Fomentar hábitos alimenticios saludables en los niños puede ser todo un desafío, pero existen varios consejos que pueden ayudar a que los niños quieran comer más frutas y verduras. Aquí tienes algunas sugerencias:
Lo primero de todo, es predicar con el ejemplo. Si quieres que tus hijos e hijas se acostumbren a comer frutas y verduras a diario, tendrás que comerlas tú también. Que te vean y que lo asocien a una rutina, a una forma de alimentación.
Otro consejo para animarles a comer frutas y verduras es ponérselo fácil. Que siempre tengan a mano fruta fresca y accesible si quieren picar algo entre horas. Si al abrir la nevera se encuentran una fuente de fresones lavados y listos para comer, o encima de la mesa un frutero con manzanas, melocotones o ciruelas, siempre será más probable que coman alguna pieza cuando tengan hambre. Por cierto, ¿sabes cómo hay que colocar los alimentos en el frigorífico para que se conserven mejor?
Que el momento de la comida ea algo ameno y divertido. Presenta las frutas y verduras de una manera atractiva y divertida. Puedes cortarlas en formas divertidas con moldes especiales, crear ensaladas coloridas con ingredientes variados o hacer brochetas de frutas. También puedes involucrar a los niños en la preparación, permitiéndoles lavar, pelar o cortar las frutas y verduras con tu supervisión.
Acostúmbrate a que en las meriendas, almuerzos y tentempiés siempre haya algo de fruta y/o verdura. Por ejemplo, un plátano en la mochila del cole, un tupper con fruta partida si vas a ir a la playa o al parque… ¿Te vas de viaje? Apunta estas ideas de snacks saludables para viajar. Aquí te compartimos también algunas ideas saludables de tentempiés para toda la familia.
Evita presionar o forzar: no obligues a los niños a comer frutas y verduras. Esto puede generar un efecto contrario y hacer que los rechacen aún más. En cambio, ofrece las opciones de manera positiva y alienta a los niños a probar diferentes alimentos. Recuerda que la exposición repetida a nuevas frutas y verduras aumenta la probabilidad de que los niños las acepten con el tiempo.
Crea un ambiente positivo durante las comidas: haz que las comidas sean momentos agradables y sin estrés. Evita las distracciones, como la televisión o los dispositivos electrónicos, y conversa con los niños sobre los alimentos que están comiendo. Puedes contarles sobre los beneficios para la salud de consumir fresones y frutos rojos y compartir historias divertidas o interesantes relacionadas con ellas.
Por último, haz que las frutas y verduras sean algo atractivo para ellos. No es lo mismo un trozo de brócoli hervido con un poco de aceite y sal, que incluirlo en una ensalada tibia con tomates cherry, arándanos y trozos de queso feta. ¿Y hacer un hummus de pimiento o remolacha? ¿O un gazpacho con cerezas y sandía? Olvídate de la idea de que las berries son un postre, e inclúyelas en diferentes platos. ¡Hay muchísimas opciones de comidas, desayunos o cenas!
Recuerda que cada persona es diferente, y con los niños puede llevar tiempo para que desarrollen un gusto por las frutas y verduras. Sé paciente y persistente, y sigue ofreciendo opciones saludables de manera constante.
Nuestro consejo es que aproveches siempre los alimentos de temporada y que no tengas miedo a probar y experimentar, ¡seguro que te sorprendes con mezclas deliciosas!
