¡Ya estamos en septiembre! ¿No tienes la sensación de que el verano ha pasado volando? Si te agobia la vuelta a la rutina y te cuesta el volver a coger el ritmo de trabajo o estudios, te compartimos algunos consejos prácticos y datos interesantes para ayudarte a hacer esta transición lo más fácil posible. Si en este post te hablábamos de cómo afrontar la vuelta de las vacaciones, ahora es el momento de llevar a cabo todos estos consejos. Para que enfrentes septiembre con toda la energía y motivación necesarias.
1. La planificación es clave
La vuelta a la rutina puede parecer abrumadora, pero una buena planificación puede hacer maravillas. Empieza por hacer una lista de todas las tareas que tienes pendientes y organízalas por prioridad. Puedes utilizar apps de gestión de tareas, una agenda de papel o el método que más te guste. Lo importante es tener claro qué tienes que hacer y cuáles son tus responsabilidades. Según la revista Forbes, las personas que planifican sus tareas son más productivas y tienen menos estrés.
2. Ponte metas realistas
Es tentador querer hacer todo al mismo tiempo al volver al trabajo, pero recuerda que eres una persona, no una máquina. Ponte metas realistas y alcanzables para evitar sentirte abrumado. Establecer metas específicas y medibles te ayudará a mantenerte enfocado y motivado. ¡Ya verás como poco a poco vuelves a tener una rutina!
3. Mantén una rutina de sueño
Durante el verano los horarios de sueño son más relajados. Seguro que te has acostado más tarde y que has pasado del despertador. Pero a medida que la rutina de volver a madrugar se acerca, es importante volver a una rutina de sueño saludable, para poder despertarnos descansados. En este post ya te dimos algunas claves para tener hábitos de sueño saludables. Los adultos deben apuntar a dormir de 7 a 9 horas por noche para mantenerse alerta y concentrados durante el día.
4. Haz ejercicio regularmente
¿Te animas a probar algún deporte nuevo? ¿Eres de los que vuelve a gimnasio después del verano? El deporte es un gran aliado para enfrentar la vuelta al trabajo en septiembre. No solo te ayudará a mantenerte en forma, sino que también liberará endorfinas, lo que te hará sentir más feliz y menos estresado. Está comprobado que realizar actividad física de forma regular mejora la memoria y la función cognitiva. Si además lo combinas con frutos rojos y otras frutas llenas de vitaminas, ¡tu cuerpo y tu mente lo van a agradecer!
5. Come de manera saludable
La alimentación juega un papel fundamental en tu nivel de energía y concentración. Opta por una dieta equilibrada con mucha fruta y verdura y evita el exceso de azúcares y alimentos procesados. Las superfrutas como los frutos rojos pueden ser tus grandes aliados, ¡anímate a comerlas a diario! Según la OMS, una dieta saludable puede aumentar tu productividad y reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
6. Organiza tu espacio de trabajo
Tu entorno de trabajo puede tener un gran impacto en tu productividad y comodidad. Tanto si trabajas en casa como en una oficina, dedica tiempo a organizar tu espacio de trabajo: ordena y limpia la mesa donde vayas a ponerte, deshazte de lo que no necesites y asegúrate de tener todo lo que necesites a tu alcance. Está comprobado que un espacio de trabajo organizado puede mejorar la concentración y la eficiencia.
7. Aprende a decir «no»
Es fácil sobrecargarse de responsabilidades al volver al trabajo después de las vacaciones. Aprende a decir «no» de manera amable pero firme cuando sientas que estás asumiendo más de lo que puedes manejar. Según la revista Psychology Today, establecer límites saludables es esencial para mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
8. Mantén el equilibrio entre trabajo y vida personal
Dedica tiempo a tus hobbies, familia y amigos. Según un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida personal está relacionado con una mayor satisfacción laboral y una mejor salud mental. En este post ya te hablábamos de lo que es verdaderamente importante en la vida, ¿todavía no lo has leído?
9. Practica el autocuidado
No subestimes el poder del autocuidado, o lo que es lo mismo: tener tiempo para hacer esas cosas que te gustan y te hacen sentirte bien. Dedica tiempo a ti mismo para relajarte y recargar energías. Puedes practicar la meditación, el yoga, leer un buen libro o disfrutar de un baño relajante. La gestión del estrés es clave para nuestro bienestar general. Y si te apetece darte algún capricho como comerte unas fresas con chocolate, o cocinar un delicioso bizcocho de algunas de nuestras recetas, ¡disfruta el momento!
10. Mantén una actitud positiva
Por último, pero no menos importante, mantén una actitud positiva. La vuelta a la rutina y al trabajo puede ser desafiante, pero un enfoque positivo puede marcar la diferencia. Dar las gracias por las cosas buenas que te pasan, disfrutar de los buenos momentos con la familia y amigos, tener una mirada positiva sobre la vida. Según la Universidad de Stanford, una actitud optimista está relacionada con una mayor resistencia al estrés y una mejor salud en general.
En resumen, septiembre puede ser un mes de transición desafiante, pero con una planificación adecuada, metas realistas y cuidado personal, puedes hacer que la vuelta a la rutina y al trabajo sea mucho más fácil y llevadera.